En Japón, un robot recorre las oficinas para echar a los adictos al trabajo.
En Japón, el viernes pasado, Alsok, una empresa privada de seguridad, anunció que durante las noches un robot de vigilancia recorrerá las oficinas de la empresa japonesa Duskin, dedicada a servicios a domicilio y alquiler de material diverso, para expulsar a los empleados adictos al trabajo que se quedan haciendo horas extra.
El robot sabe tomar solo un ascensor para explorar planta por planta y también sabe detectar la presencia de personas en las oficinas a horas tardías y hasta preguntarles su identidad. Los empleados deben mostrar su identificación al robot, que es pasada por un lector que registra los datos del empleado. El robot de Alsok está en alquiler por 390,000 yenes (2,300 €) por mes.
Fuente: Comunidad TecnológicaPublicado con El navegador Flock