40 aniversario de la matanza de Tlatelolco.
El genocidio se cometió en contra de una manifestación pacífica, y fue llevado a cabo por el Ejército Mexicano y el grupo paramilitar Batallón Olimpia, planeado por el gobierno mexicano en contra del Consejo Nacional de Huelga, órgano directriz del movimiento. Gustavo Díaz Ordaz, el entonces Presidente de la República, asumió la responsabilidad de los hechos durante su informe de gobierno de 1969, aunque muchos opinan y aseguran que Luís Echeverría Álvarez, el entonces secretario de gobernación y posteriormente Presidente de la República de 1970 a 1976, fue el verdadero responsable.
Gracias a la acción gubernamental al pretender ocultar información, jamás se ha logrado esclarecer exactamente la cantidad oficial de asesinados, heridos, desaparecidos y encarcelados. La fuente oficial reportó en su momento 20 muertos, pero investigaciones actuales deducen que los muertos podrían llegar a varias centenas y responsabilizan directamente al Estado Mexicano.
Politólogos e historiadores coinciden en señalar que este movimiento y su terrible desenlace incitaron a una permanente y más activa actitud crítica y opositora de la sociedad civil, principalmente en las universidades públicas, así como a alimentar el desarrollo de guerrillas urbanas y rurales en los años setenta.
Autores como Fernand Braudel, Immanuel Wallerstein y Carlos Antonio Aguirre Rojas coinciden en señalar al movimiento de México inserto en un contexto planetario de luchas sociales surgidas y recreadas de las universidades luego de vivirse un periodo de bonanza económica por la Posguerra, siendo Braudel el primero en denominar al movimiento Revolución cultural de 1968, caracterizado por revolucionar para siempre los tres principales espacios de recreación de la cultura: la familia, los medios de comunicación y la escuela.
Fuente: Wikipedia.